Hoy 15 de febrero, todo ha vuelto a la calma.
El Día del Amor, ha fenecido a las 12 de la noche.
Y como Cenicienta, me quito los zapatitos de cristal, los recuerdos amorosos, los regalos tiernos. saludos y vuelvo a la "normalidad" .
Normalidad que me despierta con un video angustiante de un padre, en Talagante ,que relata un secuestro y asalto acontecido en su vivienda, con sus familia y mascotas, que fueron desvalijados , mientras yacían amordazados .
Y enciendo la TV para ver que me ofrece el día y siguen las noticias de asaltos, delincuencia, incendios provocados por malignas y maledettas , ambiciosas manos, inflación desatada, corrupción, fraudes, violencia intrafamiliar, mala atención para los pobres en los Hospitales, limitados a años de espera, denuncias de los padres de 4 jóvenes, que a punto de titularse de pilotos, mueren en un avión en mal estado (a sabiendas) su familia, reclama justicia, muere un brigadista joven luchando contra el fuego, un tipo estafador, que fingió un cáncer para obtener beneficios es condenado, mientras otros de cuello y corbata con delitos peores, se mueren de la risa en libertad, asaltos, armas y disparos, es decir miserias humanas variadas .
El Día del Amor, fue un respiro, un "arito en el camino", una aspirina, un calmante para este caos que no para y que muchos políticos adversarios ," le echan leña al fuego" para promover sus ideales, importándoles un comino su patria y su país, con tal de echar abajo al gobierno de turno y mantener el poder vigente en sus manos y hacer y deshacer como se les venga en ganas, porque así es el destino de los pobres material y espiritualmente.
Otros políticos pregonando siempre Justicia Social pero aburguesados, miran para el lado y se hacen los lesos: no hay peor ciego y sordo que no quiere ver, ni escuchar.
Hemos vuelto a nuestra rutina, nuestra "normalidad" y el carrusel sigue imparable: las denuncias, demandas, sospechas todo sigue igual, aumentan los altos de expedientes en tribunales y juzgados, profesionales y personas ambiciosas que defienden lo indefendible, porque "Don Dinero" es el que manda y nada nada cambie.
A pesar que aún quedan algunos idealistas que exponen consignas, palabras de denuncias o en general, estoicos todos , miramos y reclamamos entre nosotros mismos, pero nada cambia y se va acumulando la ira por dentro hasta que un día estalle o se duerma anestesiada por la droga o en una botella de vino.
Yo misma y mis amigos que ya no están, me he vuelto contemplativa y dejé de luchar , de gritar, de golpear la mesa por mis derechos y los ajenos: le dejamos la pega a los jóvenes, a los nietos.
Pero quién soy yo para alzar mi voz en la multitud ??
Una pobre mortal N N ¡
Pienso en las banderas de lucha guardadas, selladas por siempre .
Resignada me voy a mi computador y escribo cuentos, historias, poemas románticos o eróticos, recuerdos y nostalgias, o tomo mis pinceles y me evado pintando cosas sin importancia, decorativas, de "bonitos colores, alegres", claro porque la terapia del color es buena , como la Relajación, y otras yerbas alternativas que levantan el espíritu y así me escapo de lo vital, realmente importante.
Es de noche y tarde, sentada en mi terraza evado el calor y la realidad soñando, mientras de pronto se abre la puerta del jardín común y pasa por mi lado, frente a mi, un vecino joven caminando con su bicicleta de la mano y con su rostro velado, porque a esta hora es una mueca por el agotamiento físico y emocional.
Apenas exclama:
_Buenas noches vecina¡ _
Yo sonriendo, en un gesto amable y cordial le respondo.
_Hola cómo está vecino?_
Él con un hilo de voz me dice apenas:
_Cansado, cansado, muy cansado vecina¡_
Fotografía: crédito a quien corresponda.
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