AUMENTO DEL SUELDO MÍNIMO EN CHILE Y LA PENSIÓN SOLIDARIA
Hace tiempo que tengo abandonados mis
blogs y mi viejo computador, mis jaleos existenciales me han detenido. Por febrero estuve en riesgo de morir y una
vez más comprendí lo maravilloso que es Respirar y estar en Paz, amar a los
hijos, a los nietos, a los hermanos, a los amigos…y a la Poesía , mejor dicho la Literatura , las Artes;
porque en este período he devorado libros preciosos, que me
rescatan y reconcilian.
Previo sentarme a escribir, me preparo
una deliciosa taza de té y conecto la Radio Oasis , con Música de mi época, la misma de
sus locutores y auditores. Hermanados todos en este querer revivir los momentos
inolvidables y bellos. Cuando me encuentro con la pasión viva y las ganas de
rebelarme febrilmente, frente al titulo
mencionado arriba, la Cámara
de Diputados, el Senado, diarios, televisión, etc. una canción Romántica remece
el corazón y los recuerdos caminan por todos los recodos, adheridos al alma como una
enredadera perenne, que se niega a morir (tema para otro momento) Luego de la
ensoñación surgida de la romántica canción, se hace un flash y aparece Elvis
Presley, llenando mi habitación de música, como si estuviera dando un salto a
mi costado y todo el sonido espectacular de “No seas cruel” lo inunda todo.
Curiosamente, cuando pongo Presley en la pantalla, el PC me corrige y pone
“Pelvis”, como si supiera de los encantos de este hombre que nos enloquecía de
adolescentes con sus movimientos ídem.
Pero volviendo al tema en cuestión, por
este tiempo, que he vuelto a trabajar, desde los 65 años, pese a estar
pensionada, por “gozar” de la 6ª- parte del que fuera mi Sueldo mensual, que la AFP (Asociación de Ahorro Previsional),
dispuso UNILATERALMENTENTE, que los millones de pesos, que yo, afiliada tenía y
que me descontaban sagradamente “por ley” todos los meses, debía “extenderlos”
hasta los “92 años” sin considerar que soy hipertensa, diabética y otras
yerbas, es decir adulta mayor de alto riesgo.
Pero eso no le importa a nadie, porque la ejecutiva frente a mi reclamo, se
limitó a decirme:
- ¡Lo siento Sra., pero así lo estipula la Ley ” y no hay nada que hacer,
lo que podría hacer es ir al Municipio a pedir, que le den una pensión, “un
subsidio de ayuda solidaria”, luego que la visite la Asistente Social
de su comuna y dictamine si es necesario o no, pero en su caso como la pensión
es baja, la pueden ayudar.
Le respondo:
_¡No, no quiero que me ayuden¡_
_ Quiero que me den “Mi dinero”, fruto
de mi trabajo ¡
_¡ Y sólo durante 15 años más, para vivir dignamente¡
Ella argumenta:
Sra.
¿Pero si vive hasta los 92 años y no hasta cuando usted quiera cómo
vivirá?
YO: ¡Eso será “mi problema” y no de su
AFP, ni suyo
Ella:
_Sra.
¡Así lo establece la Ley ¡¡
No es mi culpa¡ Pida una pensión solidaria
Yo: ¡Claro que no es su culpa, sino de
los que inventaron el sistema “para desplumarnos a los trabajadores, usar
nuestros dineros y disponerlos por el tiempo que se les de la gana¡ Hasta a usted le puede pasar cuando tenga mi
edad y jubile.
Me mira,
con esas miradas políticamente correctas, planas sin matices, toma un
lápiz lo guarda, ordena unas tarjetas, para que me vaya y finalmente toma mi
mano y me dice: “Sra. No se aflija más, vaya al Municipio y pida una pensión
solidaria ¡Le prometo que no puedo hacer nada¡ Le deseo lo mejor. No deje de
hacerlo ¡La ley dice que puede¡
Saco mi mano de la suya, con un poderoso
sentimiento de frustración y el recuerdo de aquellos ejecutivos (cuervos) que
visitaban mi trabajo antiguo, ofreciéndonos este mundo y el otro al jubilar
promocionando su AFP, con folletos coloridos y spot televisivos publicitando beneficios
inexistentes para la mayoría, que no leyó ”la letra chica”.
Quisiera ser menos educada en ese
momento y gritarles:
¡Váyanse al diablo todo ustedes¡
¡Váyanse al diablo todo ustedes¡
Pero me paro dignamente y me despido con los ojos nublados por la ira y la pena,
con el corazón lleno de amargura, los pómulos enrojecidos, porque la presión me
ha subido.
Me voy caminando por las calles del
centro como si nada fuera consistente, que mi mundo se hubiera quebrado en mil
pedazos, con el pánico de la vejez in mente y me repito:
¡No quiero ser un cacho para nadie¡
Sólo me queda seguir trabajando hasta
que esté lúcida y bien, después quiero morir sin molestar a nadie. Y vivir en
carpe diem hasta que llegue mi momento de partir ¡
Después de tragarme el orgullo y aconsejada por familiares y amigas, gestioné la dichosa “Pensión Solidaria”. Fui donde un
simpático, pero ineficiente Asistente
Social, de mi Consultorio de Salud, a una cuadra de la antigua casa que
arrendaba y vivía con mi mascota. Me fue
a visitar y conversar conmigo, me encontró razón en todo lo que le expuse. Luego quedó fascinado cuando supo que yo era poeta y me pidió hasta que le leyera
unos poemas. Me pareció demasiado bueno todo: ¿aspirinas? Después me derivó a
otro lugar para ver la pensión Solidaria. Hice los trámites, con el documento que me extendió, para
que fuera un “encuestador” a verme.
Estuve sin poder salir varios días. Cuando vino, justo yo andaba comprando, ya se iba y no
quería entrar porque le tenía miedo a los perros de una vecina que ladraban, y
“quería hacerme la encuesta en la calle.” Se molestó mucho porque le solicité que entrara, para que viera la
casa (casa antigua del barrio República) De mal talante me preguntó frases clisés. Me dio un papelito con una
dirección y un plazo de no se cuantos días. Quedaba en la punta del mundo el lugar y debí tomar 2
micros diferentes y caminar largas cuadras hasta llegar a la institución
señalada. Tuve que esperar un rato, para
que finalmente me llamara una mujer
administrativa, que no era Asistente Social (nunca la vi, sólo su firma) y me
dijera que mi puntaje era de 12 .770 punto, demasiado alto, para cualquier
beneficio. Me quedé muda. Le pregunté si lo podían hacer de nuevo, porque era demasiado,
ya que ni siquiera era propietaria y si
podía dejar un reclamo por el encuestador. También que el Asistente Social del
centro de Salud, lo daba por hecho.
Me pasaron un papel y un lápiz para que
lo dejara reclamo. Así lo hice, sabiendo que lo dejarían en un cajón olvidado.
Cuando le expliqué a la administrativa
la problemática de arrendar, me dijo que
fuera a Reclamar por el puntaje a otro lugar del Municipio, que quedaba al
extremo de la ciudad. Cuando fui, la persona que me nombraron estaba con
licencia médica y me atendió otra que la subrogaba y me dijo, que ese puntaje
era definitivo y etc., etc. y etc., que no se podía cambiar, porque el gobierno
no se que cosa. Finalmente: humillante y vejatorio.
Me enojé conmigo misma por ser tan ilusa
e imaginar que algo resultaría. Había gastado dinero y tiempo, me repetí que en este país a nadie le importa nadie. Y que mi drama era el drama de muchos jubilados y
pensionados, que vivíamos solos.
Siempre supe que no hay más alternativas
que seguir trabajando hasta que uno pueda y si es que se encuentra a esta
altura, sin hacer exigencias mayores.
Lo curioso que hace como 1 año, hicieron
un reportaje en televisión y mostraban personas solventes e incluso una dueña
de pastelería en el sur, con bajos puntajes, como indigentes, que tenía pensión
Solidaria, beneficios y ayuda económica en comestibles y mostraban a otras
madres de familia en la pobreza misma con altos puntajes. Otros con beneficios
de viviendas, funcionarios corruptos que arreglaban a su favor los beneficios.
Tal vez por ello eran tan drásticos con los que somos nn.
Afortunadamente me puse a trabajar 3
mediodías en la semana y estudiar Medicina
Alternativa Holística (Reiki, Aromaterapia, Gemoterapia) trabajé tantos
años en Salud como educadora, que conocía el tema y las necesidades propias y
ajenas.
Además estos conceptos y estas
disciplinas espirituales son una medicina que ayuda el alma, más que nada. Nunca tendré una propuesta mercantil en mi
vida, así que más que nada es alimento espiritual y de sanación cuando alguien
me requiere.
En este caminar laboral como adulta
mayor, me he sentido contenta de poder
ser útil, de estar frente a un computador, hacer RRPP, seguir creando, sentirme
vigente, preparada y convincente. Demostrarme a misma que me queda cuerda para
ser autosuficiente; sin embargo me cuesta levantarme en las mañanas.
Afortunadamente entro a las 10:30 AM. Los años pesan y no pasan en vano.
En las tardes cuando suelo irme más
tarde de lo que debiera, porque siempre hay algo pendiente y uno quiere mostrar
eficiencia ,me encuentro cara a cara, como muchos ciudadanos chilenos con ese
vejatorio bus, sistema, Invento
Diabólico llamado Transantiago, que impuso en Chile un ciudadano político de
“primera” , que cuando vio el desastre no encontró nada mejor a semejanza de
Pilatos, lavar su manito izquierda y derecha, inculpando a su camarada, mujer inteligente;
poseedora del título de una de las más queridas por el pueblo e insertas en la política chilena; me incluyo en
el cariño y admiración, pero la quiero a “ella sola”; sin los oportunistas y
frescos que sacaron partido y se olvidaron que el dinero era para beneficiar al
pueblo y no sus bolsillos.
Entonces vuelvo la realidad y uno se
abruma. Escucha las peleas de los
parlamentarios por la TV ,
que sólo les importa lo que proyectan y tener adherentes, hablando del Salario
mínimo, que es una vergüenza:
_¡Y CLARO QUE ES UNA VERGUENZA¡.
Cuando uno observa la
realidad ajena: las madres, los padres
que van a trabajar y vuelven por las
tardes cansados, agobiados, haciendo
todo lo posible e imposible por sus hijos con un salario miserable que no
alcanza para sujetar su realidad con
todas sus necesidades.
De pié, afirmada en el sujetador del micro,
me pregunto tantas cosas de vuelta a mi casa, donde me espera mi amorosa Coca,
mi perra leal, que con sus almibarados ojos, y sus saltos de alegría me hace
olvidar el cansancio del día y este preguntarme :
_¿Qué cerebro perverso inventó el
Salario Mínimo, las AFP, las Isapres, la explotación del hombre por el hombre,
la falta de amor y de conmiseración,
génesis de todo lo gris de éste mundo?
1 comentario:
Maritza ha hecho un nuevo comentario en la entrada "AUMENTO DEL SUELDO MÍNIMO EN CHILE Hace tiempo que...":
Mi preciosa:TAN de acuerdo con todo lo que dices,no sabes cuánto... sólo deseo decirte que te escribo hoy aquí (no para hacer "RRPP") para darte todo mi cariño, mi abrazo apretado, aunque sea así virtualmente, pero igual espero que lo sientas.
Eres un tesoro muy especial de persona, mujer y amiga.
Te quiero mucho.
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