lunes, julio 11, 2011

FACUNDO CABRAL "NO ESTÁS DEPRIMIDO, ESTÁS DISTRAÍDO"




De Facundo Cabral







No estás deprimido, estás distraído, distraído de la vida que te puebla.


Distraído de la vida que te rodea: delfines, bosques, mares, montañas, ríos.


No caigas en lo que cayó tu hermano, que sufre por un ser humano cuando en el mundo hay 5,600 millones.






Además no es tan malo vivir solo. Yo la paso bien, decidiendo a cada instante lo que quiero hacer, y gracias a la soledad me conozco; algo fundamental para vivir.


No caigas en lo que cayó tu padre, que se siente viejo porque tiene 70 años, olvidando que Moisés dirigía el éxodo a los 80 y Rubinstein interpretaba como nadie Chopin a los 90. Solo por citar dos casos conocidos.






No estás deprimido, estás distraído, por eso crees que perdiste algo, lo que es imposible, porque todo te fue dado. No hiciste ni un solo pelo de tu cabeza por lo tanto no puedes ser dueño de nada. Además la vida no te quita cosas, te libera de cosas. Te aliviana para que vueles mas alto, para que alcances la plenitud. De la cuna a la tumba es una escuela, por eso lo que llamas problemas son lecciones.






No perdiste a nadie, el que murió simplemente se nos adelantó, porque para allá vamos todos. Además lo mejor de él, el amor, sigue en tu corazón.


¿Quién podría decir que Jesús está muerto?


No hay muerte: hay mudanza. Y del otro lado te espera gente maravillosa: Gandhi, Michelangelo, Whitman, San Agustín, la Madre Teresa, tu abuela y mi madre, que creía que la pobreza está más cerca del amor, porque el dinero nos distrae con demasiadas cosas, y nos aleja por que nos hace desconfiados.


Haz sólo lo que amas y serás feliz, y el que hace lo que ama, está benditamente condenado al éxito, que llegará cuando deba llegar, porque lo que debe ser será, y llegará naturalmente.





"CARTA A UN SICARIO" RITA MERCEDES CHIO ISOIRD ESCRITORA ARGENTINA



Publicado por Rita Mercedes Chio Isoird el julio 11, 2011 a las 5:55pm
CARTA ABIERTA A UN SICARIO


Cuando Ud era apenas un bebé, un niño…puede que no lo tenga en cuenta, que todo lo ingresaba por su boca, era vida. El vientre de su madre, era o es vida, el llanto de su hijo al nacer, sus primeros pasos, el día que lo nombró por primera vez, el sol que le hace brillar sus ojitos o el que Ud toma, al lado de una piscina celeste y limpia como deberían ser las almas.


Alguna vez habrá dicho un “Te quiero”, porque de esa regla universal, nadie puede escapar, a menos que Dios se haya olvidado ponerle un corazón en su pecho. Alguna vez, se habrá detenido ante una simple flor, aunque solo sea por curiosidad, verdad?. El árbol que lo refresca y protege, lo haya plantado quién sabe quién, también es vida, como sus mascotas y el trino que escucha cada mañana al despertar.


Entonces Ud señor sicario, sabe lo que es VIDA.


En qué parte del camino olvidó respetarla?. Qué fue lo que trastocó sus valores éticos y morales como para que esta palabra sagrada, ya no tenga valor alguno en su conciencia?


Dinero? Avaricia? Resentimiento? Locura?


Cuando fue que creyó o decidió que una VIDA, tiene precio y aún así, aunque con recaudos, logre dormir plácidamente rodeado de otras vidas que seguramente dice amar.


No es penoso que un arma, nueva, lustradita, sea su objeto de caricias y promesas de un futuro mejor? Y seguramente, la cuide tanto o más, como se cuida un retoño en la casa lindera a la suya…


Y hasta me arriesgo a pensar que en su cuello, además de llevar oro, pende una cruz que no sangra, simplemente porque es de metal.


Sicario o dueño de vidas ajenas…destructor de sueños que no aprendió a tener, espíritu anestesiado, ojo atento en la mira infrarroja de sus días oscuros…5 minutos antes de su muerte, será en vano que eleve su mirada al cielo.


En nombre de todas las ilusiones que Ud destruyó con muy buena puntería, cuando le compre un juguete a su niño, no olvide lavar las monedas de su bolsillo y tener presente que las ideas no mueren, los poetas se hacen más grandes que nunca, su alimento seguirá germinando en campos de paz y aunque pise despiadadamente una semilla de vida, esta, germinará en otros corazones multiplicada por mil.


Apiádese de Ud mismo...porque nadie lo llorará, como ahora todo un planeta, llora los poemas que quedaron truncos, junto a una simple guitarra y un viejo bastón.






(Por nuestro querido Facundo Cabral y tantos más)

PRONUNCIAMIENTO DE ESCRITORES Y ESCRITORAS, ARTISTAS DE TEATRO, DANZA, MÚSICA, FOTOGRAFÍA, ESCULTURA Y PINTURA, ANTE EL ASESINATO DE FACUNDO CABRAL EN GUATEMALA


                                                        

   HONRAR LA VIDA






Acaban de matar a Facundo Cabral en Guatemala. Queremos decirle al mundo que lo sentimos profundamente, que no callamos, que nos duele ser el sepulcro del canto y la esperanza. Que nos perdone el mundo entero, porque aquí nos hemos olvidado de ser humanos, y cada día salimos a las calles y caminos a enfrentar la muerte. Que nos perdone el mundo, porque en esta tierra se asesinó a un poeta y su sangre se nos escapó del cuerpo y de las fronteras. El enemigo está dentro, cantaba Facundo. Que por ello nos perdone el mundo. En Guatemala, vivir es un acto de heroísmo cotidiano.
Que nos perdone el mundo, porque un 9 de julio, en un Boulevard que paradójicamente lleva el nombre de “Liberación”, se derramó la sangre de un argentino universal, comprometido con la verdadera libertad. Nosotros, los hombres y mujeres de la poesía, de la palabra, de la música, del teatro, la danza, la escultura, la fotografía y la pintura de Guatemala, exigimos al gobierno de Guatemala justicia para un hombre justo, y honramos la vida de quien la honró, haciendo nuestra la voz de Eladia Blázquez cuando cantaba aquello de “Merecer la vida, no es callar y consentir tantas injusticias repetidas. Es una virtud, es dignidad y es la actitud de identidad más definida. Eso de durar y transcurrir no nos da derecho a presumir, porque no es lo mismo que vivir, honrar la vida”.
Amigo y maestro Facundo, te adeudamos la ternura, las palabras de aliento y el abrazo y, sobre todo, la factura que te pasó la vida en nuestra tierra. Pero como nos dijiste alguna vez: “la vida no te quita cosas: te libera de cosas… te aliviana para que vueles más alto, para que alcances la plenitud. De la cuna a la tumba es una escuela; por eso, lo que llamas problemas, son lecciones. No perdiste a nadie: el que murió, simplemente se nos adelantó, porque para allá vamos todos. Además, lo mejor de él, el amor, sigue en tu corazón.” Estás para siempre entre nosotros.




Guatemala, 9 de julio de 2011