martes, julio 16, 2024

IL RAGAZZO DEGLI ANNI '80_ AMÉRICA COMPARINI SALAS _ TALAGANTE _ CHILE


Anoche mirando unas fotografías del Barrio República, hoy llamado "Barrio Universitario," que cobija a cientos de jóvenes estudiantes ,ávidos de instruirse y cambiar sus vidas por un bien superior ,
; recordé que en esa misma calle donde aparece la Bomba  Italia, estuve conversando brevemente  "con el muchacho del año 1980"...y me pregunté qué sería de él y su vida....si alguna vez nuestros destinos se volverían a cruzar ?...
No se cómo se llamaba, pero lo nombraré Francesco...que encuentro muy bonito y que me recuerda a Italia. Por lo cercano a la Pompa....
Él tenía el cabello rizado y un mechón  que caía despreocupado  sobre su frente y unos pequeños y estilizados bigotitos , al parecer  recortados con mucha prolijidad  y esmero... Rememoré a mi padre en ese acto tan íntimo y masculino , que a mí de niña y adolescente me provocaba una gran  curiosidad  observarlo, en un ritual tan sui generis
Sus ojos de color  marrón  ,  siempre parecían sonreír , a pesar que sus cejas arqueadas hacia abajo,  podrian darle un aire melancólico...
De mediana estatura, caminaba algunos pasos adelante mio.   No sé que  me llamó la atención en él, tal vez que para su edad era como demasiado  formal ...sin embargo parecía  simpático, risueño, un poco tímido.
Tendría como 27 años...
Yo tenía 36 e iba con mis hijas a visitar a una tía  y a mis primas que vivían a la vuelta ,  en  la calle Echaurren
Ambos caminábamos  por la calle Republica.
Él iba a dos pasos de distancia y pasábamos frente  a la Pompa Italiana 
En  la puerta habia un bombero con su uniforme rojo arreglando y enrrollando una manguera...
Yo miraba el ventanal ,de la gran vitrina dónde se podía ver un antiguo y rojo carro,  que seguramente usaron bomberos de generaciones pasadas, algunos hijos de hombres de la bota o familiares.
Una hermosa reliquia del pasado!
A través del vidrio ví que el joven  se detuvo y buscaba con insistencia algo en sus bolsillos y parecía no encontrarlo...
Me di cuenta que buscaba un encendedor, porque tenía un cigarrillo sujeto en su boca 
_Tiene bonitos labios pensé... labios besadores?
Siempre, no sé por qué, me fijo en la boca y los ojos de los hombres ...
Tal vez para intuirlos  cómo y cuándo aman...
Yo había encendido recién un cigarrillo con un fósforo, al bajar del microbus.
En la casa había un vehículo,  pero yo no sabía manejar, la verdad que prefería me llevarán, encontraba complicado y estresante hacerlo , además  , generalmente , salía los dias sábados sola con mis hijas, eso nos relajaba y alegraba mucho a las tres.
Era una tarde de primavera con sol, los árboles altos, frondosos estaban llenos de verdes hojas y se movían con la brisa suave
 La calle era hermosa y llena de casas señoriales , de un barrio antiguo,  muy tradicional , de gran riqueza arquitectonica e histórica 
Yo caminaba sola en ese instante , porque las niñas , mis 2 hijas , habían ido al kiosko azul de la esquina, a comprar golosinas , en especial  una galleta de chocolate y crema   llamada " Negrita", que era deliciosa.
Mi hija mayor  de 14 años y la menor de 7 años..
Yo llevaba en mi cartera una cajita de fósforo , con un Copihue rojo dibujado , nuestra flor nacional..
Y como buena fumadora y todos los fumadores , era solidaria en compartir  el fuego tan necesario para encender  y dar vida a ese placer que provocaba tanto ese   cilindro nicotinoso 
 Me acerqué a él y le pregunté moviendo la  la cajita en la mano:
_Necesita fuego? _
Se dio vueltas hacia mí y me miró sorprendido Sonriendo con timidez me dijo que Si...como disculpándose ...
Los hombres algo tímidos , a las féminas nos provocan curiosidad y cierto interés... tal vez es  morbo...eso que  nos insta a tratar de conocerlos y descubrir secretos en ellos , especialmente en su  íntimidad...donde en ocasiones uno se sorprende gratamente...
Para que no se sintiera incómodo , traté de encender el fósforo y llevarlo hacia él, pero la pícara brisa de la tarde lo apagó...entonces a modo de proteger la nueva llamita, juntamos nuestras manos para cubrirlo del viento...
Yo sentí algo extraño y eléctrico a juntar nuestras manos ..las de él un poco temblorosas ...raro tambien extrañamente igual las mías .
Y así él encendió el cigarrillo y lo aspiró con placentera unción ...momento que nuestras miradas se cruzaron y sonreímos cómplices de tal acontecer....
Justo en ese momento mis hijas venían corriendo y mostrando sus golosinas.
El joven me miró con sus ojos sonrientes y exclamó : 
_Muchas gracias...muy gentil señora !_
Y se fue caminando por la ancha calle  de baldosas grises  , fumando su cigarrillo y sintiendo en su rostro la brisa de primavera 
Mis hijas felices me tomaron cada una de un brazo y nos fuimos a la casa de la tía .
El joven se perdió en la inmensidad de la tarde primaveral  bajo los gigantes árboles y sus volutas de humo...

Foto: a quien corresponda autoría

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